CNT A FONDO: Sindicato de Artes Gráficas, Comunicación y Espectáculos de Madrid

El Sindicato de Artes Gráficas, Comunicación y Espectáculos es uno de los sindicatos de ramo con más trayectoria dentro de la confederación. Ismael Arnaiz, Diseñador en una Agencia de Publicidad y 29 años, que ocupa el cargo de secretario general, nos habla sobre su situación actual.

Eduardo Pérez / Periódico cnt

¿Cuántas secciones sindicales hay, y en qué empresas y sectores? 

En nuestro sindicato tenemos secciones sindicales en: Marca, RTVE, Telecinco, Alta Films, en el sector de la Distribución de Prensa y en Telefónica Audiovisuales.

¿Ha habido recientemente algún conflicto laboral o actividad en alguna empresa que destaque entre las demás?

En el último año la actividad sindical se ha centrado en pequeños conflictos: Imprenta Garso, Signarama, Siempre Creativos, La pequeña Bety, Medialab-Prado, SGAE y algunos otros de cierta entidad como el del cierre de VEO7 o, anteriormente, la lucha contra la precariedad en RTVE, por poner dos ejemplos. Dentro de la actividad sindical, cabe destacar la nueva sección de Telefónica Audiovisuales que, aunque lleva poco tiempo en funcionamiento, está realizando un intensa actividad que ha dado como resultado que se afilien a la misma un buen número de trabajadores.

¿Cuáles diríais que son los aspectos más positivos y más negativos de vuestro sindicato?

Nuestro sindicato tiene una buena cantidad de gente joven con las ideas muy claras y muchas ganas de lucha, que está acompañada de militantes con una mayor experiencia. Existe una intención siempre clara de profundizar y desarrollar formas de hacer y de construir organización desde prácticas libertarias.

Como negativo, nos hace falta una planificación a medio y largo plazo para muchos de nuestros objetivos, ya que la mayoría de las veces nos movemos por impulsos. Y como he expresado anteriormente, quizá nuestra labor más urgente es que todavía no hemos logrado ampliar la base de militantes de nuestra organización.

¿Cómo definiríais el ambiente de conflictividad sindical o/y obrera en vuestra ciudad, más allá de la CNT?

Si somos realistas la conflictividad sindical en Madrid está en una de sus horas más bajas. Con el largo etcétera de ataques que estamos sufriendo los trabajadores, no estamos sabiendo organizar una respuesta contundente desde nuestra actividad sindical. Es más, gracias a la gran labor que han hecho CC.OO y UGT para la patronal la gran mayoría de la población ya no cree en los sindicatos.

¿Tenéis algún tipo de relación con otras fuerzas sindicales locales?

Nuestro sindicato decidió, hace poco, que debía desarrollar en nuestro sector los acuerdos de confluencia con otras organizaciones obreras que se han tomado recientemente en Pleno Confederal. Por lo que estamos empezando a sentarnos a hablar con el sindicato de Artes Gráficas, Comunicación y Espectáculos de la CGT y la sección de Solidaridad Obrera que trabaja en nuestro sector; también hemos contactado con TACE y con el SAT de la Casa de la Moneda, organizaciones de las que todavía no tenemos respuesta a nuestro ofrecimiento. El pasado 29 de septiembre, realizamos una convocatoria conjunta frente a la Patronal de las Artes Gráficas y el Ministerio de Cultura. En el futuro seguiremos trabajando en esta confluencia en la lucha.

¿Cuál es la postura del sindicato hacia el movimiento 15-M?

Muy positiva y participativa. Para nuestro sindicato ha sido una bocanada de aire fresco y de esperanza. Desde un principio, nos convencieron muchas de sus formas de funcionar, que aunque improvisadas eran libertarias. Muchos de nuestros afiliados participan activamente en diferentes comisiones de trabajo del 15-M, así como en sus asambleas de barrio y en las diferentes movilizaciones que se están realizando en Madrid. Es más, creo que a muchos de nosotros nos ha hecho reflexionar sobre maneras de hacer y construir con ilusión desde la base, maneras diferentes de comunicar y llegar a una gran parte de la población, algo que parecía impensable hace unos meses.

¿Cómo veis el panorama local en cuanto a agitación social –más allá de la lucha sindical-?

Esta respuesta va unida a la anterior, tras la eclosión del 15-M se han reforzado muchas luchas en nuestra ciudad. Las acciones por una sanidad y educación pública y de calidad, los intentos de frenar desahucios, las ocupaciones o la reconstrucción del entramado barrial están teniendo ahora un nuevo impulso. Acciones que antes no congregaban a más de unas decenas de personas, ahora son cada vez más masivas.

Nuestro sindicato siempre ha estado vinculado fuertemente a este tipo luchas sociales. Por un lado, muchos de nuestros afiliados participan individualmente en ellas, y por otro, comprendemos que no podemos hablar de una separación real entre las lucha en nuestro centro de trabajo con otras que se realizan de forma paralela en defensa de los servicios públicos, en nuestros barrios, LGTB, ecologistas…. Nuestra actividad anarcosindicalista, aunque tiene como motor principal sus acciones en el centro de trabajo, no puede obviar otros aspectos muy importantes de nuestro entorno y nuestra vida fuera de los centros de trabajo.

Concretamente, nuestro sindicato participa en la Coordinadora Anti-Privatización de la Sanidad Pública de Madrid y anteriormente en otras acciones como en la Semana de Lucha de Rompamos el Silencio.

¿Podríais hacer una pequeña introducción a la composición de clases actual en Madrid?

La clase obrera en Madrid como en el resto del Estado está cada vez más marcada por la precariedad, la temporalidad y la falta de identidades. Cada vez existen menos empresas que aglutinen a una gran plantilla de trabajadores, ya que las atomizan en decenas de subcontratas y empresas fantasmas de servicios, ya casi nadie trabaja para quién le malpaga. Las personas pasan por una gran cantidad de sectores en un corto período de tiempo con contratos que no alcanzan ni los dos meses de duración.

Por otro lado, la crisis económica ha hecho que el desclasamiento social que supuso la ilusión de pertenecer a la “clase media” ya casi nadie se lo crea. Un gran sector de la población totalmente hipotecado y que ha vivido para y por el motor del consumo se está dando cuenta del gran espejismo en el que ha vivido y de sus consecuencias.

A la clase dominante, empresarios, políticos y banqueros… y demás vividores del trabajo ajeno ¿qué decir? les va mejor que nunca, ya que ahora nos roban y exprimen con cada vez menos oposición.

¿Y una introducción a la composición de la representación política oficial?

En Madrid, tanto en el ayuntamiento como en la Comunidad, gobierna el PP y la derecha más rancia. Su política se basa en la privatización de todos los servicios y empresas públicas. Una política económica basada en los principios más brutales del capitalismo, tan surrealista que coloca los derechos de los trabajadores como un impedimento del progreso económico de la comunidad.